El 29 de octubre de 2024 la DANA golpeó con fuerza a la Comunidad Valenciana. En cuestión de horas, el agua lo cambió todo: hogares dañados, trabajos interrumpidos y una sensación compartida de incertidumbre. Para muchas personas, la emergencia no terminó cuando bajó el nivel del agua; ahí comenzó el verdadero reto: volver a empezar.
En ese contexto nace Apoyo Yntegral Post-DANA con un objetivo claro: acompañar a las personas y familias afectadas más allá de la urgencia inmediata y ayudarlas a recuperar estabilidad, dignidad y futuro.
Desde el 15 de diciembre de 2024 y hasta finales de 2025, el programa ha estado —y sigue estando— al lado de 30 personas que viven o trabajan en algunas de las zonas más castigadas por las inundaciones: La Torre, Castellar-Oliveral, Torrent, Ribarroja del Turia, Sedaví, Benetússer, Silla, Aldaia, Quart de Poblet, Algemesí, Mislata o Albal. Detrás de cada localidad hay una historia, y detrás de cada historia, una necesidad concreta.
Porque el impacto de una catástrofe no es solo material, sino también económico, emocional y social. Por eso, la intervención ha sido integral: desde garantizar alimentos, suministros básicos y productos de higiene, hasta apoyar el pago del alquiler y de los servicios esenciales, reponer mobiliario y equipos informáticos o facilitar atención psicológica para quienes aún conviven con el recuerdo del miedo y la pérdida. Todo ello acompañado de orientación administrativa, acceso a ayudas públicas y acciones de activación laboral y educativa, especialmente importantes para no cronificar la situación de vulnerabilidad.
Gracias al programa, mi familia y yo recibimos el apoyo necesario para cubrir gastos esenciales en nuestro hogar. Vivimos en una zona afectada por la DANA y, debido a lo sucedido, tuvimos que faltar varios días a nuestros empleos. El respaldo de YMCA nos permitió pagar facturas de servicios básicos en un momento muy difícil.
El programa Apoyo Yntegral Post-DANA es un ejemplo de cómo las iniciativas sociales bien coordinadas pueden marcar la diferencia cuando la emergencia pasa de ser noticia a convertirse en vida cotidiana. Es también una muestra del compromiso de YMCA con su entorno y de la importancia de seguir invirtiendo en respuestas humanas, cercanas y sostenidas en el tiempo.
Gracias al compromiso de Fundación ‘la Caixa’, podemos responder con agilidad a las necesidades más urgentes y acompañar a quienes más lo necesitaba
Reconstruir no es solo reparar lo que se perdió, sino acompañar a las personas para que puedan volver a creer en el mañana.
